El sector de la perfumería y la cosmética es una de las industrias que más invierten en innovación dentro del sector de gran consumo.

Actualmente están apareciendo diferentes proyectos donde la biotecnología está presente en muchas investigaciones del campo olfativo, como por ejemplo la producción de fragancias mediante microorganismos, conocidos como “Fragant Bacteria”.

La innovación y tendencia hacia lo natural está siendo cada vez más tangible, desde ingredientes naturales y procesos de producción,… hasta envases y embalajes.

Los creadores de aromas somos cada vez más conscientes de la necesidad de caminar hacia la sostenibilidad ambiental, concibiendo los olores como una alabanza a las conexiones naturales y humanas.

Muchos dicen que «la perfumería es la gran asignatura pendiente donde aún la sostenibilidad no ha encontrado realmente su lugar«. Algo con lo que en Natur Botanic y Laboratorios Prady, estamos en total desacuerdo, demostrándolo en cada una de nuestras creaciones.


El mercado de la perfumería y la ambientación lleva varios años ofreciendo alternativas más conscientes y limpias, y por tanto más respetuosas con el medio.

El objetivo primordial dentro del sector de la perfumería y la ambientación ha sido conseguir fragancias y aromas agradables y duraderos. Con el avance de la innovación y las nuevas tendencias, se incluyen además, conseguir una producción natural y sostenible.

Ante este nuevo escenario, nos vemos en la obligación de aclarar determinados conceptos, con el fin de que el consumidor, cada vez más consciente, sepa lo que adquiere y las repercusiones que tiene sobre el medio que nos rodea.

Partimos por tanto de la diferencia entre lo natural y lo sostenible:

  • Natural: Implica la no artificialidad. Para que el proceso de formulación y elaboración de un perfume se considere natural, deberá incluir mayoritariamente materias primas de origen natural.
  • Sostenible: Implica la armonización e integración de aspectos medioambientales, sociales y económicos. Por tanto desde esta perspectiva, se haría referencia a todo proceso de fabricación eficiente y respetuosa con el medio ambiente, incluidos todos los aspectos de “naturalidad” anteriormente mencionados.

La tendencia hacia lo natural es necesaria, pero no hay que olvidar que porque un proceso de producción se considere natural, no necesariamente tiene que ser sostenible.

Existen casos en los que no está permitido el uso de ciertos aromas naturales, como el “Almizcle”, bastante común dentro del sector de la perfumería y la ambientación, ya que su consumo de manera natural diezmaba la población de ciervos almizcleros. En estas situaciones, y para evitar un mal mayor se utilizan aromas sintéticos que imitan a la perfección el aroma natural.

Como vemos, hay casos particulares y no tantos, en el que lo natural puede llegar a no ser sostenible, y lo sintético sí.

Las esencias naturales aportan base a la creación, pero los sintéticos las notas de fondo, facilitando la durabilidad de la fragancia en la piel e intensificando los aromas.

Como todo en la vida, una mezcla equilibrada de aromas naturales y sintéticos puede dar lugar a una producción sostenible en su totalidad, con un perfume agradable y un aroma que evolucione y se mantenga durante todo el día.

En NaturBotanic partimos de un mínimo de un 80% de ingredientes de origen natural en nuestras fragancias, mezclados con ingredientes sintéticos y evitando todos aquellos ingredientes que provengan de origen animal.


La labor de respeto y mantenimiento de una cultura sostenible no es nada fácil, desde la búsqueda de proveedores concienciados con esta realidad, hasta llegar a finalizar cada creación, cuidando cada detalle.

No obstante, ¡no existe otro camino posible!